Con el continuo aumento de los precios del alquiler en Madrid, muchos se preguntan si es mejor seguir alquilando o dar el paso a la compra. Mientras que alquilar ofrece flexibilidad y menor inversión inicial, comprar sigue siendo una apuesta segura a largo plazo, especialmente con los actuales tipos de interés en moderada estabilidad. En zonas como Vallecas o Usera, aún se pueden encontrar viviendas a precios competitivos, lo que hace que la compra sea una opción atractiva para quienes buscan estabilidad y rentabilidad futura.
Sin embargo, factores como la inflación, las condiciones de financiación y la evolución del mercado laboral juegan un papel clave en la decisión. Los alquileres en zonas céntricas han alcanzado máximos históricos, con incrementos de hasta un 10% anual en distritos como Arganzuela y Chamartín. En contraste, la compra ofrece la posibilidad de construir patrimonio, aunque requiere una inversión inicial más elevada. Antes de tomar una decisión, es fundamental analizar el presupuesto, las proyecciones a futuro y las oportunidades de inversión en cada zona de la ciudad.